Comparación de la Política de Persecución Penal y Carcelaria de El Salvador y Costa Rica

 La Política Criminal en Latinoamérica

De manera introductoria, se recomienda la lectura del siguiente artículo:

Disuasión focalizada: una nueva estrategia de Política Criminal para América Latina

En América Latina las tasas de criminalidad representan una de las mayores preocupaciones para cada nación perteneciente, recaudando cifras alarmantes, sobre todo, en materia de homicidios. En el artículo seleccionado, se hace mención que la ONU posee un índice de muertes de 10 muertes por cada 100 mil habitantes, como un método de control, prevención y estatus para el desarrollo de política y el monitoreo de las tendencias violentas.

Regiones de Europa poseen los índices más bajos, mientras regiones latinoamericanas presentan cifras alarmantes:

Comparativa (años desde 2022-2023)

Regiones europeas

Homicidios por 100 000

Regiones latinoamericanas

Homicidios por 100 000

España

0,69

Costa Rica

17,75

Francia

1,34

El Salvador

7,90

Italia

0,54

Guatemala

22,05

Portugal

0,72

Bolivia

4,37

Andorra

2,58

Colombia

25,31

Bulgaria

1,09

Honduras

31,44

Dinamarca

0,98

Panamá

11,34

Grecia

0,84

Paraguay 

6,98

Croacia

0,79

República Dominicana

12,37

Noruega

0,72

Argentina

4,32

Fuente: Elaboración a partir de datos Datosmacro, Homicidios Intencionados. (2023).

Como puede observarse, la tabla hace mención de algunos países de ambos continentes. Sin embargo, hay una clara desproporcionalidad en cuanto a las regiones latinoamericanas y su violencia creciente, con una preocupación enfocada en Honduras, Colombia y Guatemala, superando los 10 homicidios, doblando y/o triplicando el índice propuesto por la ONU.

Algunos datos llamativos como el caso de Andorra, representa la cifra más alta en la tabla, siendo algo inusual respecto a su tamaño y características propias de la región. Por su parte, Argentina, Bolivia y El Salvador se encuentran dentro del rango establecido, lo cual, si bien es positivo, no llegan a igualar los bajos niveles de homicidios observados en Europa. La brecha es realmente significativa respecto a los estándares de seguridad:

Fuente: Datosmacro, Homicidios Intencionados. (2023).

Asimismo, en la imagen presentada puede observarse las mismas cifras desde una representación más gráfica, donde Latinoamérica se establece como el continente más preocupante en materia de seguridad. El mapa resalta las regiones con mayor cantidad de homicidios, donde ninguno de sus países se acerca a la escala verde o al menos un punto de equilibrio.

Las políticas criminales adoptadas por este continente han manifestado su inclinación por el uso de la fuerza y el encarcelamiento masivo, con consecuencias como el hacinamiento carcelario o el incremento de la violencia por parte de las autoridades policiales. Como bien dicta la Política Criminal y la ciencia de la que conforma su base, la Criminología, se conoce que estas medidas resultan ineficaces. Las políticas se centran únicamente en la sanción y el castigo, no en la prevención. A pesar de ello, algunas de estas soluciones han dado resultados beneficiosos para el país, un ejemplo de ello es El Salvador.


El Salvador: “Guerra contra las pandillas” – La mano dura contra el crimen

En marzo de 2022, el presidente electo de la nación salvadoreña, Nayib Bukele, implementó el encarcelamiento masivo como una estrategia de combate contra la inseguridad que el país enfrentó durante décadas. La misma consistía en una política de detención carcelaria sin orden judicial y la suspensión de derechos constitucionales de manera temporal. Asimismo, inauguró el Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), donde la prisión ostenta una capacidad para 40 000 reclusos.

No es del desconocimiento público el descontento por parte de instituciones internacionales Si bien es cierto, la Política Criminal debe considerar factores exógenos como la falta de empleo, bajos salarios, marginalidad social, desigualdad de acceso de posibilidades y, en general, la baja calidad de vida, que son determinantes de la criminalidad, estos, a ojos de los propios salvadoreños y los Acuerdos de Paz no han tenido una atención real, solo un cumplimiento formal desde la década de los 90’s.

En este sentido, el fenómeno de la violencia había pasado a ser un asunto incontenible, por lo que las respuestas estructurales y legislativas de la política no respondían a la realidad social. Las estrategias del Estado resaltaban a las instituciones encargadas de la seguridad y el orden público como órganos contradictorios entre sí, ineficaces y directamente desinteresados en la lucha contra la delincuencia.

Desde la instauración de este régimen, la cifra proyectada para 2024 era de 1,8 por cada 100 000 habitantes, mientras en 2015 se tuvo la cifra de 106,3. Bukele ha respondido a una tasa de 15,1 durante sus cinco años de gobierno. Lo cual se puede constatar en la siguiente noticia:

El Salvador finaliza 2024 con la tasa de homicidios más baja en los últimos 10 años

En base a tales datos cuantitativos, el gobierno, en conjunto con un amplio sector de la ciudadanía, respaldan el modelo de “mano dura” como la solución efectiva que ha podido recuperar las esperanzas y el sentimiento de protección sobre el bienestar social. A pesar de ello, queda en espera la conformación de una estructura de derecho y un modelo sostenible en el largo plazo, basado en la prevención y el desarrollo social, puesto que esta medida, si bien ha sido de carácter urgente y necesario, no excluye consecuencias como futuros abusos de poder, desproporcionalidad de la justicia con la criminalización de la pobreza, además de las violaciones de los derechos humanos y legislativos que resultan en costos democráticos para el Estado.


Costa Rica: el crecimiento de la delincuencia

De modo introductorio al siguiente apartado, se observa el siguiente gráfico:

Gráfico sobre los móviles de homicidios dolosos en Costa Rica. Periodo 2023-2024


Fuente: Observatorio de la Violencia. (2024).

Costa Rica está entrando a una época donde el narcotráfico está convirtiéndose en el móvil principal de los homicidios en el país. La nación registra cifras cada vez más significativas con el pasar de los años, donde la causa principal es el ajuste de cuentas o la venganza. Solo en 2023 el territorio registró un total de 906 homicidios dolosos, con un incremento del 43% respecto al año 2022 y solo una pequeña disminución en 2024 con 880 homicidios cometidos.

Los y las costarricenses exigen medidas urgentes ante las bandas de narcotraficantes y la creciente delincuencia que, si no se aborda en estas etapas, llegarán a crecer como un fenómeno incontrolable en un futuro (caso parecido a El Salvador). El gobierno debe establecer un freno ante las bandas criminales, que reflejan el atraso en materia de protección que tiene el país como también la ausencia de medidas que aborden las causas más profundas del crimen, como las desigualdades socioeconómicas, carencia en temas de educación y oportunidades, como también la falta de integración con respecto a los sectores marginados.

Al mismo tiempo, no solo es importante destacar las consecuencias más graves que trae esta ineficacia, que son las pérdidas humanas, sino también su afectación al diario vivir de la mayoría de la población, donde la desconfianza hacia el gobierno y su actuar va en aumento debido a la disconformidad social. Un ejemplo de ello es la siguiente noticia:

El turismo "por ahora" se sostiene frente al narcotráfico

Noticias como la anterior hacen preguntar a la población hasta dónde se debe llegar para que el país tome en cuenta la necesidad de cambios y reformas, sin necesidad de llegar a tomar las medidas “radicales” que casos como la nación salvadoreña han tenido que poner en práctica.


¿Cómo es la persecución penal y carcelaria en Costa Rica?

Las instituciones costarricenses destinadas al control social formal en materia de seguridad han optado por un enfoque mucho más drástico con el fin de frenar la delincuencia creciente que se ha mencionado anteriormente. El Estado opta por poner de manifiesto funciones más enfocadas en la intervención penal y su extensión hacia la “creación de nuevos delitos o por agravar los ya existentes; (…), extiende su ámbito de actuación a aquellos sectores que en la opinión pública se consideran más amenazantes (…)” (Acevedo, s.f., p. 43). En otras palabras, la Política Criminal de Costa Rica busca métodos de apaciguamiento a corto o mediano plazo, sin tomar en cuenta las consecuencias que acarrean como la estigmatización de ciertos grupos sociales o la frustración acumulada por la inoperancia, ya que estos métodos no representan una solución real que perdure en el tiempo.

Asimismo, no honda en metodologías de prevención y rehabilitación, enfrentando casos de hacinamiento penitenciario o el abuso de acciones de control punitivo. Al mismo tiempo, el establecimiento de soluciones exigidas por parte de la población, ha llevado a que las políticas se establezcan bajo la presión social, siendo la opinión pública, un fuerte evaluador de la eficacia real del endurecimiento penal. Esto acarrea otras consecuencias como el debilitamiento de las mismas, la sobrecarga, falta de recursos o el despilfarro de los mismos en materia de seguridad, el aumento de la perdida de derechos fundamentales en el caso del tratamiento de los reclusos o la polarización de la sociedad.


Comparativa de la persecución penal y carcelaria entre El Salvador y Costa Rica

Una vez manifestadas las realidades sociales de cada nación, queda constatar las diferencias entre sus Políticas Criminales, con la finalidad de comprender el tratamiento propio de la violencia en ambos sectores, realizando un análisis crítico que ponga de manifiesto las actitudes positivas que deben reforzarse o las negativas que deben cambiarse.

El Salvador:

  • Posee un régimen político estricto basado, en materia de seguridad, en el encarcelamiento masivo, la suspensión de derechos y garantías gubernamentales para los reos con el fin de atender la urgencia del incremento de la delincuencia en el territorio.
  • Posee herramientas de prevención como el incremento de patrullajes, el uso de la tecnología de vigilancia, el reforzamiento de las fuerzas armadas, programas educativos y reintegración social juvenil, programas como “Yo Cambio” (enfocado en jóvenes con riesgo a ser reclutados en pandillas, mejoramiento de la infraestructura y la creación de leyes para enfrentar la violencia organizada.
  • No ha tenido un gran impacto en la política social respecto a ámbitos socioeconómicos, el desempleo o la marginalidad. Los cuestionamientos sobre las violaciones de los derechos humanos son persistentes a nivel internacional.
  • Ha habido demandas que aseguran las detenciones arbitrarias, además de reprender contra las condiciones penitenciarias.

Costa Rica:

  • Previamente su enfoque estaba más centralizado entre la sanción y la rehabilitación, sin embargo, debido a la presencia del narcotráfico, ha decidido reforzar el poder punitivo.
  • Posee herramientas de prevención como el fortalecimiento del cuerpo policial, estrategias de disuasión y prevención comunitaria, además de programas educativos en barrios vulnerables por medio de la Política Nacional de Seguridad Pública (2020-2024). Asimismo, ha puesto énfasis en iniciativas que promuevan la cooperación comunitaria y la vigilancia policial, la Política de Desarme y Control de Armas, campañas de sensibilización y prevención contra la violencia de género.
  • Se enfrenta a críticas en cuanto a sus medidas de eficacia, además aun tener estrategias insuficientes respecto a las políticas de inclusión social.
  • Ostenta centros penitenciarios con un alto índice de hacinamiento penitencial.


Conclusión

Las naciones latinoamericanas ostentan un punto crítico y preocupante respecto a la implementación de estrategias de Política Criminal y una verdadera eficacia en sus resultados. Las tasas de homicidios son alarmantes y, sobre todo, en el caso de Costa Rica, preocupantes debido al fenómeno creciente del narcotráfico. Las cifras de la delincuencia bajo esta índole no disminuirán con el pasar del tiempo y un modelo reactivo, a como lo ha manejado hasta el momento la nación, no brindarán grandes oportunidades de progreso en materia Criminológica. Por el contrario, la falta de prevención y la violencia organizada atraerán un país como base de operaciones para este tipo de criminalidad.

Al igual que en El Salvador, las instituciones de rehabilitación y reinserción son pocas e ineficaces para el desafío creciente. Asimismo, el accionar del endurecimiento de las penas y la respuesta de castigos masivos atraerá consecuencias como la insostenibilidad del modelo a largo plazo, que afectará el desarrollo social, además de alterar la perspectiva de un verdadero Estado proporcional e igualitario. Como también, al igual que ocurrió en el territorio salvadoreño, la falta de acción temprana, conllevara a la toma de medidas drásticas y urgentes, poniendo en perspectiva consecuencias tales como el retroceso democrático y la violación de derechos fundamentales por no establecer una Política Criminal adecuada en el momento fundamental.


Bibliografía

Acevedo, M. M. (s.f.). La Política Criminal Contemporánea y la Práctica Penitenciaria Costarricense. Revista de Ciencias Jurídicas, 41-51.

Datosmacro. (2023). Comparativa: Homicidios Intencionados. Obtenido de Expansión/Datosmacro: https://datosmacro.expansion.com/demografia/homicidios

Lemus, L. (28 de diciembre de 2024). Finaliza 2024 con la tasa más baja de homicidios en los últimos diez años. Obtenido de elsalvador.com: https://www.elsalvador.com/noticias/nacional/homicidios-indice-de-pnc-violencia-sucesos-2024/1190065/2024/

Murillo, Á. (23 de septiembre de 2024). El turismo de Costa Rica resiste (por ahora) los efectos de la expansión del narcotráfico. Obtenido de El País: https://elpais.com/america/2024-09-24/el-turismo-de-costa-rica-resiste-por-ahora-los-efectos-de-la-expansion-del-narcotrafico.html?

Netto, J. A. (20 de octubre de 2020). Disuasión focalizada: una nueva estrategia de política criminal para América Latina. Obtenido de derechopenalonline: https://derechopenalonline.com/disuasion-focalizada-una-nueva-estrategia-de-politica-criminal-para-america-latina/

Observatorio de la Violencia. (2024). Gráficos y Tablas: Homicidio Doloso. Obtenido de Observatorio de la Violencia: https://observatorio.mj.go.cr/tipo-de-hecho-violento/homicidio-doloso

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